Anabel Fernández Sagasti, próxima a asumir como la nueva presidenta del Pj en Mendoza sacó el escudo peronista y todos se enojaron, al ver que era un nuevo logo el que remplazaba el histórico y simbólico escudo peronista.
Pero la modificación estética fue una estrategia desacertada, ya que no cayó bien en la propia interna justicialista. Muchos son los «Compañeros «que han virilizado mensajes en los que resaltan el escudo y qué significa cada parte, en contraposición al logo insulso que utilizo la líder camporista Fernández Sagasti.
El escudo creado en el 30 fue y será un claro emblema para el peronismo, y se debe respetar. Por eso hay algunos justicialistas que rechazan su eliminación.