A través de la resolución 408/20 del Departamento General de Irrigación (DGI), publicada el 24 de junio, dispone la obligatoriedad de presentar una declaración jurada para los usuarios que tengan permisos de riego precarios o temporarios.
“Plan de Gestión de oferta y demanda” contempla la quita de permisos a quienes registren deuda, la disposición del control volumétrico del recurso hídrico en algunos casos y la redistribución del agua de fincas que tengan derecho pero que no estén cultivados, aún con el pago al día, entre otros.
Departamento General de Irritación pretende regular el agua según la “oferta y demanda” la distribución del agua de la provincia, despertó preocupación en productores y las asociaciones y tomeros que las integran.