Así lo concluyó un estudio de una consultora especializada. Cómo el coronavirus y la virtualidad expandida expusieron más los datos de la gente en internet.
El informe “Ciberpandemia: la otra cara de la crisis sanitaria” destapó una tendencia que en este atípico 2020 parece asentarse: la de los ataques informáticos. La migración acelerada de las personas al entorno digital en todos los ámbitos trajo aparejado un aumento del 70 % de los ciberdelitos, de acuerdo a la investigación elaborada por BTR Consulting. “El cibercrimen creció más rápido que las medidas de seguridad”, señaló el CEO de la consultora en la conferencia virtual en la que se presentó el informe.
Los números hablan por sí solos: se detectaron 130 modalidades nuevas de ciberestafas en América Latina y el Caribe. En el primer semestre del año, se produjeron 450 amenazas por minuto en todo el mundo.
Según los expertos, el pasaje de múltiples esferas de la vida a la modalidad digital produjo una transformación más rápida que las medidas de seguridad implementadas. Como consecuencia, la sociedad “aún no cuenta con la preparación para afrontar digitalmente la nueva normalidad”, aseguraron.
Si bien desde la consultora alertaron que “el objetivo de los ciberdelincuentes somos todos”, remarcaron que “los niños son los más vulnerables”.
Cómo son los ataques
La ingeniería social (engañar a las personas para que cedan sus contraseñas o datos bancarios) fue utilizada en más del 30 % de los casos. Esto incluye al phishing (hacerse pasar por una persona o empresa de confianza), que suele ser emitido en forma masiva a múltiples personas. El 65 % de los grupos que atacan utilizan el spear phishing, que es como el phishing pero dirigido a un usuario en particular.
En general, los ataques de «phishing» crecieron el 59 % durante la pandemia, con 600 campañas diarias en promedio.
Otra práctica utilizada por ciberdelincuentes fue emplear el temor por la COVID-19 como cebo. Desde enero, se registraron 907 mil mensajes que publicitaban de forma engañosa medicamentos, productos, beneficios fiscales y seguros de emergencia.
Desde BTR, señalaron que crecieron el 22 % los dominios falsos. En este sentido, se multiplicaron los fraudes a través de propuestas “demasiado buenas para ser verdad”. Entre otras, se ofrecían bonificaciones de Netflix, comida gratis, descuentos o beneficios en supermercados, y ofertas de trabajo remoto.
Gabriel Zurdo, presidente de BTR, sostuvo: «En todos los casos, la tecnología resultó un vehículo para su concreción, pero en muchos casos se produjeron a partir de prácticas o conductas de seguridad deficientes, o incluso inexistentes”, señaló.
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