Hay coches que parecen salidos de alguna película como el auto del príncipe Carlos que funciona con queso y vino, pero también están los que en verdad salieron en la pantalla y son objeto de deseo de los coleccionistas, con precios que llegan a los millones de dólares.
Los autos que aparecen en películas o series de Hollywood pueden llegar a alcanzar grandes precios para los coleccionistas por la historia que tengan detrás, como el carro que Paul Walker usó en ‘Rápido y Furioso’, pero los siguientes vehículos son los más costosos que han salido en la pantalla:
Aston Martin DB10 – ‘Spectre’ (2015)
Batimóvil – ‘Batman’ (1966)
La serie del caballero de la noche protagonizada por Adam West en los años 60 tuvo su propia versión del auto del héroe que contenía una cabina para dos personas con un domo en forma de huevo, un teléfono y muchos más artículos para combatir el crimen.
El batimóvil, que es una versión modificada de un Lincoln Futura de 1955, fue vendido en enero de 2013 en una subasta en Scottsdale, Ariz, con un costo de 4.6 millones de dólares.
Aston Martin DB5– Goldfinger (1964)
El clásico vehículo de 007 que se quedó como una insignia del personaje cuando lo condujo Sean Connery y su silueta se volvió icónica. También apareció un año después en ‘Thunderball’ (1965).
El vehículo original usado en las películas se vendió por 4.6 millones de dólares en 2010, pero una versión restaurada con todos los artilugios de James Bond alcanzó un costo de 6.4 millones.
Ferrari Berlinetta – ‘The Love Bug’ (1968)
En esta película de comedia de Disney el automóvil protagonista era un Volkswagen Bettle color blanco con una línea roja y azul, además del número de carreras 53, que fue popularmente conocido como Herbie.
Sin embargo, el auto más costoso de la cinta fue un Ferrari 250 GT LWB Berlinetta Scaglietti o conocido popularmente como el “Modelo Tour de France”. Solo se hicieron 9 unidades en todo el mundo, por lo que el valor por uno de estos llegó a los 6.7 millones de dólares en 2012 en una subasta de RM Auctions.
Ferrari 250 GT California Spyder – ‘Ferris Bueller’s Day Off’ (1986)
El caso de este coche en particular se trata de un modelo idéntico al que conduce en la película el actor Matthew Broderick; sin embargo, el que se vendió en 2008 no fue el que estuvo en el set, aunque sí era propiedad del actor James Coburn.
Cuando el vehículo se vendió por 10.9 millones de dólares, para sumar a la confusión detrás de su historia, fue comprado por Chris Evans, pero no el actor del Capitán América de Marvel, sino de un famoso de los medios de comunicación en Reino Unido con el mismo nombre.
Ford Gulf GT40 – Le Mans (1971)
El valor de este automóvil se incrementó en gran medida porque es parte de tres coches de este modelo que fueron construidos específicamente con menos peso y ser aptos para las carreras.
Gracias a su aparición en la película dirigida por Lee H. Katzin sobre el piloto americano Michael Delaney, el Gulf GT40 de 1968 fue vendido en 2012 en una subasta de RM Auctions por la cantidad de 11 millones de dólares.
