En medio de una cumbre virtual, la titular del PRO, Patricia Bullrich, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ambos precandidatos a presidentes, mantuvieron una fuerte discusión por el conflicto con la Unión Cívica Radical (UCR) en Mendoza, demostrando las fuertes tensiones que hay entre los máximos referentes de Juntos por el Cambio por el armado electoral de este año.
Es que, con la presencia del expresidente nacional, Mauricio Macri, los altos mandos del partido opositor se reunieron en las últimas horas para explorar una estrategia ante la escalada de conflictos dentro del ecosistema de la coalición opositora de Juntos por el Cambio en las provincias que desdoblaron las elecciones.
Precisamente, la cumbre del PRO se convirtió en el campo de batalla de una nueva pelea entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, figuras centrales de la oposición que aspiran a competir por la Presidencia en estas elecciones 2023.
En detalle, el principal foco de la tensa discusión entre Bullrich y Larreta fue Mendoza, uno de los bastiones de la UCR, donde el titular del PRO local y aliado del alcalde porteño, Omar de Marchi, amenaza con disputarle a Alfredo Cornejo y Rodolfo Suarez el control de la provincia. Por su parte, Macri intervino en el debate, pero procuró preservar el rol de árbitro.
Vale recordar que, De Marchi amaga con competir por afuera del frente Cambia Mendoza con el argumento de que Juntos por el Cambio carece de institucionalidad en esa provincia. Con Cornejo a la cabeza, que decidió competir por la sucesión del gobernador Rodolfo Suarez, el radicalismo acusa al dirigente de PRO de intentar quebrar a alianza y ser funcional al peronismo.
Desde que estalló el conflicto hace un par de semanas, Bullrich, socia estrecha de Cornejo, se puso al frente de la cruzada para evitar una ruptura en Mendoza, dado que entiende que esa pulseada local en uno de los bastiones de Juntos por el Cambio puede dañar a la coalición opositora a nivel nacional.
Los laderos de Bullrich, sospechan que Larreta tejió en las sombras para dañar a Cornejo y esmerilar su proyecto presidencial. Por eso, esa pelea subterránea con el Jefe de Gobierno porteño se cristalizó en el encuentro virtual de los líderes del PRO.
Con el expresidente Macri como espectador, Patricia Bullrich ratificó su postura y enfrentó a Horacio Rodríguez Larreta, ya que acusó a De Marchi de instalar un clima de ruptura en Mendoza que podría tener consecuencias a nivel nacional de cara a las elecciones 2023.
El argumento de Bullrich es que en esa provincia hay elecciones primarias, por lo que el aliado de Larreta no tiene excusas para no usar ese mecanismo. En esa clave, Macri y la exgobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, compartieron esa posición.
De hecho, el exmandatario nacional, Mauricio Macri, se mostró pesimista sobre la chance de un acuerdo entre De Marchi y Alfredo Cornejo, por lo que sugirió que el diputado del PRO debía competir en las primarias de Juntos por el Cambio en Mendoza.
Es que, los antecedentes de Río Negro y Neuquén, donde Juntos por el Cambio se dividió y no se cumplió el reglamento interno de la mesa nacional para definir las candidaturas, complican el armado en Mendoza y Tucumán. También, los jefes de PRO pusieron la lupa en Córdoba, donde aún no hubo acuerdo.
Tras una larga discusión entre Bullrich y Larreta, los jefes de PRO decidieron que los representantes del partido fundado por Macri en el comité que diseñó Juntos por el Cambio para resolver los armados en las provincias irán a persuadir a De Marchi para hallar una solución pacífica.
Sin embargo, Bullrich remarcó que tienen que definir qué van a hacer entre 21 y el 25 de febrero, antes del cierre de listas en siete distritos. “Piensan que con esto dañan a Patricia, pero están poniendo en riesgo el armado nacional”, concluyeron fuentes cercanas a la titular del PRO.
Fuente:diputadosbsas
